
Las imágenes capturan una rareza genética: tigres blanco, dorado, melanístico y de Bengala clásico en un solo encuadre.
Enlace de la Costa
Ver una imagen con los cuatro tonos conocidos de tigres juntos —Bengala clásico, blanco, dorado y melanístico (negro)— es algo excepcional. Hasta hoy, solo existen tres fotografías en el mundo donde coinciden estas variantes, logradas tras décadas de trabajo en centros de conservación y cría especializada.
Contrario a la creencia popular, estos tigres no pertenecen a subespecies distintas, sino que se diferencian por mutaciones genéticas extremadamente raras que afectan la pigmentación del pelaje. Todas las variantes descienden del tigre de Bengala (Panthera tigris tigris), originario del subcontinente indio.
El tigre blanco, por ejemplo, no es albino. Su color característico proviene de una mutación recesiva que inhibe el pigmento naranja del pelaje, pero mantiene sus rayas negras. Se estima que solo uno de cada 10,000 tigres en estado silvestre puede presentar esta condición.
El tigre dorado, también conocido como Golden Tabby, tiene un pelaje más claro, casi dorado, y rayas atenuadas. Esta variante es aún más rara y se ha documentado casi exclusivamente en cautiverio. Por su parte, el tigre melanístico —a veces llamado “tigre negro”— posee una densidad de rayas tan alta que su cuerpo parece completamente oscuro, como una sombra en movimiento.
Estas tres fotografías históricas fueron tomadas en centros de conservación especializados, donde se ha logrado reproducir estas variantes mediante programas de cría controlada, respetando protocolos genéticos y de bienestar animal. Capturar a los cuatro ejemplares en una sola imagen ha sido posible solo gracias a años de trabajo, registros cuidadosos y condiciones excepcionales.
El logro no está exento de polémica: algunos expertos advierten que la manipulación genética con fines estéticos podría poner en riesgo la salud y la diversidad genética de la especie. Sin embargo, quienes gestionan estos centros defienden que estas prácticas también han permitido preservar linajes genéticos y sensibilizar al público sobre la conservación del tigre.
Los tigres, en todas sus variantes, enfrentan amenazas graves en estado silvestre: pérdida de hábitat, caza furtiva y tráfico ilegal. Hoy, se estima que menos de 4,000 ejemplares viven libres en el mundo. Estas imágenes no solo son un logro visual, sino un recordatorio de la importancia de proteger a estos grandes felinos en su entorno natural.
Fuente: National Geographic, Wildlife Conservation Society, registros de centros de conservación autorizados.