
>>Diputados rechazan reducir firmas requeridas; oposición denuncia freno a la participación ciudadana y gasto electoral excesivo.
Enlace de la Costa
Debate legislativo por la revocación de mandato
En el Congreso de Oaxaca, diputados de Morena rechazaron una iniciativa para disminuir del 10% al 3% el número de firmas necesarias para activar el proceso de revocación de mandato del gobernador Salomón Jara Cruz. La propuesta, presentada por Alejandra García Morlán (Movimiento Ciudadano) y Dante Montaño Montero (Partido del Trabajo), busca alinear la legislación local con el estándar federal y facilitar la participación ciudadana.
Actualmente, se requieren 314 mil 459 firmas —el 10% del padrón electoral de 3.1 millones de ciudadanos—, mientras que con un umbral del 3% bastarían unas 91 mil. Para la oposición, este requisito es “excesivo e inconstitucional”. En contraste, Morena sostiene que la cifra garantiza “certeza, legitimidad y equilibrio democrático”.
Obstáculos y cuestionamientos
Además del alto número de firmas, la ley actual establece que la consulta solo será vinculante si vota al menos el 40% de la lista nominal, es decir, 1.25 millones de personas. García Morlán recordó que en la revocación presidencial de 2022 apenas participó el 23.6% del padrón nacional y que en la elección de gobernador de Oaxaca ese mismo año la asistencia fue del 38.9%, lo que vuelve “inviable” alcanzar el umbral.
Dante Montaño advirtió que “ya hay brigadas recolectando firmas con el eslogan oficialista”, sugiriendo una posible manipulación del proceso. También cuestionó la redacción confusa de la boleta, que podría inducir a error entre los votantes.
Presupuesto bajo escrutinio
El costo estimado de una consulta de revocación en Oaxaca asciende a 365 millones de pesos. Esta cifra supera ampliamente el presupuesto anual de instituciones clave como el Hospital de la Niñez o la Secretaría de las Mujeres. En un estado donde el 51.6% de la población vive en pobreza y el 46.7% carece de servicios básicos, críticos señalan que destinar tantos recursos a un proceso con escasa viabilidad contradice el discurso de austeridad.
En 2023, Morena recibió 78.3 millones de pesos de financiamiento público en Oaxaca, el 41.8% del total asignado a partidos, lo que refleja su ventaja para movilizar recursos frente a la oposición. Sin embargo, no existen datos claros sobre el presupuesto específico para un eventual proceso de revocación, lo que alimenta acusaciones de falta de transparencia.
Tensiones políticas y contradicciones
La postura de Morena ha sido calificada como una contradicción con el principio de democracia participativa que el propio partido ha promovido a nivel nacional. Salomón Jara, electo en 2022 con 696 mil votos, consolidó el poder morenista en Oaxaca tras décadas de hegemonía priista. La cercanía de figuras priistas con el actual gobierno también ha generado especulaciones sobre acuerdos políticos para preservar la estabilidad interna.
El Congreso local aún no define si revisará la legislación antes de 2026, año en que podría realizarse la consulta. Para la ciudadanía oaxaqueña, que enfrenta rezagos en salud, educación y empleo, la prioridad es contar con un mecanismo de revocación accesible, transparente y económicamente viable.
Fuente: Froylán Méndez Ferrer / froylanmf@gmail.com
/ Afiliado al Sindicato Nacional de Medios de Comunicación (SINMCO).