>>La Presidenta Claudia Sheinbaum asegura que el Gobierno de México está listo para defender su soberanía y fortalecer el diálogo con EU.
Enlace de la Costa
Ciudad de México
31 de enero de 2025 – Ante la posibilidad de que Estados Unidos imponga un 25% de aranceles a productos mexicanos, la Presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que el Gobierno de México tiene preparados varios planes de acción para hacer frente a esta medida. En su conferencia matutina, Sheinbaum destacó que esta política tendría un impacto directo no solo en la economía mexicana, sino también en millones de familias estadounidenses, ya que México es el principal exportador de productos finales como automóviles, computadoras, televisores y refrigeradores.
“Tenemos Plan A, Plan B, Plan C, para lo que decida el gobierno de los Estados Unidos. Es muy importante que sepa el pueblo de México que siempre vamos a defender la dignidad de nuestro pueblo, que siempre vamos a defender el respeto a nuestra soberanía y un diálogo como iguales, como siempre lo hemos mencionado, sin subordinación”, afirmó Sheinbaum.
La Presidenta subrayó que, si bien esta medida afectaría principalmente a la economía de Estados Unidos, también repercutiría negativamente en el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que se ha consolidado como un pilar clave en la relación comercial entre los tres países. Además, recordó las posibles implicaciones para los consumidores estadounidenses, quienes enfrentarían aumentos en los precios de productos básicos como autos, televisores y refrigeradores, entre otros.
Marcelo Ebrard, Secretario de Economía, detalló que la imposición de aranceles afectaría principalmente a los estados fronterizos de Estados Unidos como California, Texas, Florida y Arizona, donde México es el principal proveedor de productos como autos y electrónicos. Ebrard puntualizó que los consumidores estadounidenses verían un aumento del 25% en el precio de estos bienes, lo que generaría una menor disponibilidad de productos y afectaría las cadenas de suministro.
El impacto sería amplio: por ejemplo, 12 millones de familias estadounidenses se verían afectadas en el mercado de los automóviles, 40 millones en computadoras, y 32 millones en televisores. Además, uno de cada tres refrigeradores vendidos en Estados Unidos se produce en México, lo que implicaría un costo adicional de casi mil millones de dólares para al menos 5 millones de familias estadounidenses.
“Conviene tenerlo en claro, el principal impacto: millones de familias en Estados Unidos tendrán que pagar el 25 por ciento más”, agregó Ebrard.
A pesar de estos posibles impactos, el Gobierno de México ha manifestado su disposición a mantener un diálogo abierto con el Gobierno de los Estados Unidos para resolver estas diferencias. En este sentido, Sheinbaum enfatizó que las mesas de trabajo semanales, encabezadas por ella misma, continúan de manera permanente para abordar temas como los aranceles y la negociación del T-MEC, con un enfoque en la colaboración y el respeto mutuo.
“Siempre vamos a mantener el diálogo, es fundamental en la relación entre México y el gobierno de los Estados Unidos”, concluyó Sheinbaum.
Fuente: Presidencia de la República.