* Un informe revela criminalización y hostigamiento sistemático contra mujeres operadoras de justicia y defensoras de derechos humanos en Guatemala.

Enlace de la Costa

Amnistía Internacional acusó a las autoridades guatemaltecas de usar el sistema penal para reprimir a mujeres defensoras de derechos humanos, exponiéndolas a discriminación y violencia de género.
AI denuncia un patrón de hostigamiento y criminalización contra las defensoras y operadoras de justicia en dicho país centroamericano.
El informe “Todo el sistema en contra”, publicado por AI, revela que estas mujeres son víctimas de persecución penal infundada, intimidación y violencia de género por parte del Ministerio Público (MP) y el Organismo Judicial (OJ).
Entre las víctimas se encuentran la exjueza Erika Aifán, la exfiscal Virginia Laparra, las exauxiliares fiscales Paola Escobar y Aliss Morán, y la abogada Claudia González.
Todas ellas han sido sometidas a procesos penales injustos y a un hostigamiento constante en su vida profesional y personal.

Un sistema en contra de las mujeres
Las mujeres criminalizadas enfrentan múltiples procesos penales simultáneos sin base legal suficiente, lo que configura demandas estratégicas contra la participación pública (SLAPP).
A lo largo de los procesos, sufren violaciones al debido proceso, como detenciones preventivas arbitrarias, retrasos injustificados y restricciones a la publicidad de las audiencias.

Persecución, discriminación y violencia de género
El informe detalla cómo las autoridades guatemaltecas han implementado una estrategia de persecución penal infundada y de intimidación, permitiendo además la discriminación y violencia de género contra estas mujeres.
Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía Internacional, señaló la gravedad de esta situación, destacando que estas acciones representan una violación de los derechos humanos.
El informe subraya que, además de la persecución judicial, estas mujeres enfrentan discriminación y violencia de género.
Los testimonios recogen incidentes de misoginia y acoso tanto en el ámbito judicial como en las redes sociales, donde son atacadas por cuentas coordinadas que buscan intimidarlas y desprestigiarlas.

Consecuencias para la justicia y la sociedad
Amnistía Internacional advierte que este patrón de criminalización no solo afecta a las mujeres directamente implicadas, sino que también pone en riesgo el acceso a la justicia en Guatemala.
La organización subraya que la persecución de mujeres que luchan contra la corrupción y la impunidad tiene un efecto amedrentador sobre el resto de profesionales del sector y sobre la sociedad en general.
Además, genera un clima de miedo que afecta la libertad de expresión y el derecho a defender derechos humanos en todo el país.

Amnistía Internacional exige acción
El informe de AI insta a las autoridades guatemaltecas a desestimar las denuncias penales infundadas contra defensoras de derechos humanos y a investigar el hostigamiento judicial y la violencia de género.
Amnistía Internacional también recomienda implementar políticas para proteger a las mujeres operadoras de justicia y defensoras de derechos humanos, y facilitar la reintegración del personal del MP injustamente sancionado o despedido.
De igual forma pide garantizar procesos de selección de jueces y magistrados transparentes y basados en méritos.

Fuente: Amnistía Internacional.