
>>La aeronave cayó en una zona residencial en medio de la niebla; investigan causas del accidente y número de víctimas a bordo.
Enlace de la Costa
San Diego, California, 22 de mayo de 2025.– Un trágico accidente aéreo sacudió la madrugada del jueves al vecindario militar cerca de Sculpin Street y Santo Road, en San Diego, cuando un avión privado Cessna 550 Citation se estrelló en una zona residencial, dejando al menos dos personas muertas, ocho heridas y diez viviendas dañadas, de acuerdo con el Departamento de Policía local.
El siniestro ocurrió alrededor de las 3:45 a. m., hora local, mientras la aeronave —proveniente del aeropuerto de Teterboro, Nueva Jersey, con escala en Wichita, Kansas— intentaba aterrizar en el Aeropuerto Ejecutivo Montgomery-Gibbs, ubicado a pocos kilómetros del lugar del impacto.
Autoridades locales informaron que las condiciones meteorológicas eran adversas. Según el subjefe de Bomberos y Rescate, Dan Eddy, una intensa niebla cubría la zona al momento del accidente, reduciendo la visibilidad a tan solo 800 metros, lo que habría dificultado la maniobra de aterrizaje.
“No se podía ver prácticamente nada al frente”, declaró Eddy. A pesar de que el piloto no reportó fallas ni declaró emergencia, el avión cayó en una calle residencial, provocando incendios y la destrucción de automóviles estacionados.
El capitán Robert Heely, comandante de la Base Naval de San Diego, confirmó que el vecindario afectado alberga a una de las mayores comunidades de viviendas militares del mundo, y expresó su solidaridad con las familias impactadas por la tragedia.
La emergencia obligó a evacuar a cerca de 100 residentes, mientras los equipos de emergencia controlaban el fuego y aseguraban el área. “Todas las personas lesionadas fueron atendidas en el centro de evacuación”, afirmó Eddy. Ningún herido fue trasladado al sitio del accidente.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) y la Administración Federal de Aviación (FAA) ya iniciaron las investigaciones para determinar las causas del accidente. Según los primeros reportes, el avión era propiedad de una empresa de Alaska y fue construido en 1985, con capacidad para entre ocho y diez pasajeros.
Aún no se ha confirmado cuántas personas viajaban a bordo, aunque las autoridades indican que todas las víctimas mortales se encontraban dentro de la aeronave. La FAA trabaja en identificar a los ocupantes registrados.
El aeropuerto donde se intentaba aterrizar no cuenta con personal de torre durante la noche, por lo que los pilotos deben coordinarse por frecuencia de aviso común, sin guía de controladores aéreos.
El vecindario sigue acordonado y las labores de remoción y peritaje continúan. Las autoridades recomiendan evitar la zona mientras persisten las evacuaciones y cierres viales.
Fuente: Departamento de Policía de San Diego, Bomberos de San Diego, FAA, NTSB, Associated Press, CNN.