>>Analistas advierten concentración de poder y debilitamiento de contrapesos tras la victoria de Claudia Sheinbaum en 2024.
Enlace de la Costa
Un poder político sin precedentes recientes
El Movimiento Regeneración Nacional (Morena) ha pasado, en apenas una década, de ser un partido emergente a convertirse en la fuerza política dominante en México. Tras las elecciones de 2024, llevó a Claudia Sheinbaum a la presidencia y obtuvo mayorías legislativas, consolidando un control político que no se veía desde el auge del PRI en el siglo XX.
Este dominio ha despertado preocupación dentro y fuera del país. Críticos señalan que México podría estar entrando en una “deriva autoritaria”, mientras defensores argumentan que Morena encarna un proyecto histórico de transformación social y justicia para las mayorías.
Comparaciones con regímenes latinoamericanos
La BBC y otros medios internacionales advierten que México podría estar transitando hacia un sistema de “partido hegemónico”, mientras que el semanario Le Grand Continent alerta que la reforma judicial que permite elegir jueces y magistrados por voto popular podría abrir la puerta a un “autoritarismo competitivo”. Estos modelos recuerdan a Venezuela bajo Hugo Chávez o a Nicaragua con Daniel Ortega, donde la legitimidad electoral se utilizó para concentrar poder y debilitar contrapesos.
Concentración de poder y militarización
Desde 2018, Morena ha impulsado reformas que, según la oposición, reducen el papel de los órganos autónomos y fortalecen al poder Ejecutivo. La creación de la Guardia Nacional, la ampliación de programas sociales masivos y la reducción de atribuciones del INE y el INAI son vistos por analistas como señales de centralización política.
Un sondeo de El Financiero reveló que el 41% de los mexicanos ya percibe a Morena como un partido autoritario. En redes sociales, algunos comparan el régimen con un modelo “orwelliano”, evocando la vigilancia total y el control descritos en la novela 1984. El académico Roger Bartra advierte que estas tendencias vienen desde el gobierno de López Obrador: “No es un peligro hipotético, es un peligro que ya llegó… está amenazando la libertad de expresión con sus agresivas mañaneras contra toda fuerza crítica”.
La versión del oficialismo y el dilema democrático
Morena sostiene que sus reformas responden a la “voluntad del pueblo” expresada en las urnas y buscan desmantelar un sistema neoliberal que favoreció a las élites. Para sus simpatizantes, lejos de concentrar el poder, el movimiento lo devuelve a la ciudadanía mediante programas sociales y un nuevo esquema de justicia popular.
La oposición, encabezada por PAN y PRI, acusa a Morena de construir un “blindaje autoritario” semejante a los modelos bolivarianos. Analistas como José Antonio Crespo advierten del riesgo de un caudillismo moderno, mientras estudios publicados en SciELO México señalan que estas dinámicas son comunes en partidos jóvenes en proceso de institucionalización.
Un desenlace con impacto internacional
México enfrenta un dilema: consolidar una democracia mayoritaria legitimada por amplias victorias electorales o repetir la historia de regímenes que usaron esa legitimidad para restringir libertades. El resultado definirá no solo el rumbo político interno, sino también la forma en que el país será percibido en el escenario internacional.
Fuente: BBC, Le Grand Continent, El Financiero, SciELO México; declaraciones de Roger Bartra.