>>Se dice que ya quedó (la carretera Oaxaca-Puerto Escondido), que solo es cuestión de qué se corte el listón
>>Lo peor que podría pasar es que luego de la inauguración, se vuelva a cerrar a la circulación alegando que aún faltan detallitos, eso sería tomarle el pelo a los Oaxaqueños

Por Fernando Cruz López

Todo está listo ya, al menos así lo indican todos los anuncios que se han estado haciendo en los últimos días, para que el próximo domingo el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, inaugure oficialmente la carretera Oaxaca-Puerto Escondido, tan largamente esperada por todos los oaxaqueños.

Aunque no he podido constatar si realmente ya está terminada al cien por ciento esta carretera, se dice que ya quedó, que solo es cuestión de qué se corte el listón y se termine el calvario de miles de automovilistas que diariamente recorren las montañas para llegar a la costa o viceversa.

Hay quienes dicen que aún le faltan varios detalles a esta vía de comunicación para que quede al cien por ciento, pues hay tramos en los que en estos momentos se trabaja día y noche para que el próximo domingo pueda ser inaugurada por el mandatario mexicano.

Prometo recorrer en los próximos días dicha carretera para informarles si en verdad fue terminada, no vaya a ser que estemos ante otra obra inconclusa, de esas que acostumbra poner en marcha el presidente de México y que luego resulta que aún les faltan muchos, pero muchos detalles.

Ahí está la refinería de dos bocas en Veracruz, que por más millones y millones de pesos que se le han invertido no ha podido producir ni siquiera un litro de petróleo y eso que ya fue inaugurada y se dijo que estaba al cien por ciento funcionando, lo cierto es que hasta el día de hoy no funciona y se le sigue inyectando dinero de los mexicanos.

Otra obra insigne de este gobierno es el tren maya, que se inauguró con bombo y platillo, pero sigue sin operar al cien por ciento, o el aeropuerto Felipe Ángeles, que está también sin funcionar completamente, y eso que se les metieron miles de millones de pesos y se inauguraron y siguen ahí, como monumentos de la opacidad y símbolos de la corrupción que el gobierno federal dice combatir, pero que en realidad la institucionalizó.

Lo peor que podría pasar es que luego de la inauguración, se vuelva a cerrar a la circulación alegando que aún faltan detallitos, eso sería tomarle el pelo a los Oaxaqueños que se podrían cobrar el enojo en las próximas elecciones.

En fin, esperemos que en esta ocasión el presidente de México sí sea serio y la inauguración de la carretera Oaxaca-Puerto Escondido sea real y se termine de una vez por todas con la larga espera que hemos tenido los oaxaqueños… Sígame en X como @visionpolitica7