>> La caricatura de confrontación que vimos ayer no se salió de los estrechos límites del ataque a toda máquina contra el candidato que ostenta la mayoría de las simpatías del electorado.
Al pueblo de Oaxaca.
Genaro Gómez
Siendo que los debates públicos son una inmejorable oportunidad para contrastar los proyectos de gobierno de las partes contendientes, la caricatura de confrontación que vimos ayer no se salió de los estrechos límites del ataque a toda máquina contra el candidato que ostenta la mayoría de las simpatías del electorado.
Todos contra Salomón, era la consigna, la parte estratégica. La parte táctica, hacer uso a fondo del modelo según el cual, después de haber dejado al Estado en calidad de catástrofe a lo largo de decenios y decenios de gobiernos priistas, se pretende echarle en cara a Salomón el haber participado en gobiernos anteriores, sin que prueba alguna exista contra su ejercicio como servidor público.
El saqueo al Estado, por mucho que les pese, es a cuenta del PRI, partido en el que por el contrario AAA tuvo toda una carrera desde su juventud de adaptación al modelo de corrupción y de impunidad imperante: le corre por las venas. Pero el recién nacido apóstata de la honestidad llamado Alejandro Avilés Álvarez osa utilizar como argumento, aunque de muestra baste un botón, la manera en que, según él, Salomón destruiría las estancias infantiles, por apoyar el programa que en este sentido lleva a cabo AMLO para que los beneficios del presupuesto lleguen directamente a los padres de familia, eliminando intermediarios funestos. Con una clara conciencia del Estado de Derecho, Andrés Manuel López Obrador estoy seguro que nunca va a apoyar al bandidaje que ha hecho estragos con la economía de las familias oaxaqueñas, eso ténganlo por seguro.
Vender candidaturas o mandar a sus hijos de vacaciones en el helicóptero oficial son solamente algunas de las linduras de nuestro contrincante mayor, bien reforzado de suyo con jugosas inversiones hipotecarias. ¿Que Salomón no conoce los 570 municipios del Estado? Falso. Los conocemos Andrés Manuel y un servidor, quienes hemos acompañado las luchas campesinas y la conformación de la UCD a lo largo del Estado y en donde hemos coincidido con Salomón en más de una de esas batallas. Muchos años. Cuarenta años. Díganme a mí si no conozco a Salomón Jara.
Cuando miraba el debate me venía a la mente el video aquel que desde National Geographic un grupo de hienas atacaban a un león solitario, hasta que otros leones llegaron en su auxilio. Las hienas de ayer deben temer ahora que otros leones llamados pueblo los hagan correr despavoridos. Tenía un cierto aprecio por la ex panista Alejandra García Morlán, pero desde su anclaje en Movimiento Ciudadano ha tenido que seguir los pasos de su coalición “va por México”, y se ha convertido en una traidora a la Patria más. Estimada Alejandra: no se gana un debate denostando ni criticando al aire, se gana con propuestas concretas, en este caso, superiores a los de tus contrincantes. Te perdiste de vista entre tanta hiena aglomerada.
Hablar de Nati Díaz no tiene mayor caso, no pinta en el escenario político oaxaqueño, forma parte de los traidores. Los demás contendientes ni figuran, es poco o casi nada lo que se puede decir acerca de ellos.
El triple A habla con soltura refiriéndose a Andrés Manuel López Obrador. Cree conocerlo, aunque la verdad sea dicha ni lo conoce y por lo visto ni lo entiende. No entiende que sus propuestas de ley como la eléctrica tienen como finalidad recuperar la soberanía energética en nuestro país, no entiende que la prioridad de prioridades es la de luchar contra la corrupción y la impunidad, de manera que nunca solaparía a un gobierno como el que el PRI intenta continuar en nuestro Estado. Ten cuidado, triple A.
Ni yo ni el pueblo vamos a permitir ataques contra la IV transformación ni contra la persona de Andrés Manuel incluso de manera subjetiva. Acuérdate que en política no hay triunfos verdaderos ni derrotas terminales.
Vamos con Salomón Jara hasta el final.