>>Hablar de contrincantes se vuelve de suyo una falacia, ya que la distancia en las preferencias de los oaxaqueños entre Salomón y otros es tan grande, que todo parece ser una cuestión de simple trámite
Genaro Gómez
Al pueblo de Oaxaca
Basta con echar una mirada a las noticias de todos los días para concluir que el triunfo de Salomón Jara ya parece irreversible. Se borran del escenario político figuras de estatura pírrica como el llamado AAA, candidato de un PRI en proceso de desaparición y que padece los resultados de unas encuestas cada vez más en su contra, por no hablar de otras figuras cuyos partidos se pierden en el basurero de nuestra historia oaxaqueña.
Hablar de contrincantes se vuelve de suyo una falacia, ya que la distancia en las preferencias de los oaxaqueños entre Salomón y otros es tan grande, que todo parece ser una cuestión de simple trámite.
No tienen ninguna oportunidad. Ni seriedad, toda vez que pretendiendo oponerse sistemáticamente a las propuestas de Andrés Manuel López Obrador, tienen el mal gusto de proponer, faltos de imaginación, una Reforma Electoral muy similar a la propuesta por nuestro presidente.
Lo que hay que tener en mente ya desde ahora es lo que viene en un futuro próximo, y es que la “Primavera de Oaxaca está por llegar”, así como está por llegar la IV Transformación. El inicio de gobierno tiene muchas facetas en donde empezar a gobernar implica limpiar la casa de las escorias de gente que habiendo ocupado un puesto público se aprovecharon en beneficio propio del dinero de la gente.
Quien haya delinquido, deberá enfrentar a la justicia, el combate contra la corrupción y la impunidad es el ABC de nuestro gobierno nacional, y en nuestro estado debemos ponerlos en práctica por primera vez en nuestra historia. Conozco a Salomón desde hace muchos años, es fuerte y decidido. Sé que no va a actuar con revanchismos, sino con una clara conciencia del Estado de Derecho que debe imperar en un buen gobierno: se trata de hacer justicia, nada más.
En mi paso diario por los rumbos de Huatulco solamente encuentro gente que te apoya, Salomón, que va a votar por ti. Las promesas sin fundamento ni principios del AAA se vuelven humo y espantan, son fantasmas, son aves de mal agüero, y así lo siente la gente.
Sigamos Salomón adelante. Oaxaca está contigo.