>>La institución reconoce el papel fundamental que desempeñan las mujeres al ejercer esta profesión, en beneficio de la salud de la población
Enlace de la Costa
Oaxaca de Juárez
12 de febrero de 2022
Guadalupe Antonio Desales, tiene 41 años de edad, es doctora con especialidad en pediatría y cuenta con la subespecialidad en terapia intensiva pediátrica, es madre de dos hijos y trabaja desde hace nueve años en el área de pediatría del Hospital Doctor “Aurelio Valdivieso” de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO).
Hoy, en el marco del Día Internacional de la Mujer Médica, fecha en la que se le rinde tributo a la doctora Elizabeth Blackwell por ser la primera mujer en el mundo en recibir el título en Estados Unidos, Antonio Desales, oriunda del Istmo de Tehuantepec, nos comparte su testimonio, y lo difícil que ha sido tener que enfrentar el estrés laboral, ansiedad y miedo en el contexto de la actual pandemia por COVID-19.
“Llegar a casa con miedo e incertidumbre y que tus hijos te quieran abrazar y tú decirles: no espérame voy a lavarme y regreso, así como revisar a un paciente y estar en riesgo de contagiarse de COVID-19, es lo más difícil que hemos enfrentado”, subrayó.
Es egresada de la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO) relató que su sueño de ser doctora empezó desde que estudiaba el cuarto año de primaria “porque desde pequeña siendo la mayor de cuatro hermanos, veía que se enfermaban constantemente y me pregunté: ¿cómo los puedo ayudar? Y conforme pasó el tiempo, en la preparatoria me interesó saber más sobre el cuerpo humano, la salud y enfermedades”, narró.
Mencionó que una de las cosas que la ha marcado al ejercer esta profesión, es no poder salvar la vida a todos los pacientes. “Cuando muere un paciente al que has estado atendiendo eso genera frustración y enojo”.
Mientras que su mayor satisfacción ha sido dar de alta a un niño o niña que ingresó con su estado de salud bastante deteriorado, pero que, gracias al tratamiento y cuidados del equipo multidisciplinario su salud mejoró, es algo significativo.
Considera que uno de los retos como mujer, es seguir preparándose. “Me gusta lo que hago, pero siempre es importante continuar estudiando, el salir de tu casa, ir a un curso, hacer una maestría, es un reto más para las mujeres, regresar del trabajo a casa y continuar con las actividades propias del hogar, sin embargo debemos seguir esforzándonos día a día, ya que hay enfermedades nuevas o cambian los tratamientos de los pacientes”.
Recordó que estando en el servicio social, atendió a toda la población, desde recién nacidos, niños, niñas, adolescentes y adultos, pero con los menores tenía una debilidad, por lo que se animó a seguir preparándose y estudiar pediatría.
Y posteriormente, la especialidad en terapia intensiva, fue porque estando en la unidad de pediatría llegaban muchos niños graves y, “me fue interesando conocer más, para salvar la vida de éstos, así como el saber que muchas niñas y niños con tratamientos sencillos, e incluso con orientación a las madres y padres, pueden cambiar totalmente su estado de salud”.
En su experiencia, lo más grave que ha atendido son las urgencias por traumatismos, debido a los accidentes viales en carreteras, ya que en algunos casos, los menores salen expulsados de los vehículos por no tener las medidas de seguridad como una silla de retención o el cinturón de seguridad puestos, “llegan con traumatismos graves en cabeza y tórax, hay que intubarlos y ponerlos con respirador”, sostuvo.
En este sentido, desde los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) reconocen el papel de las mujeres en la atención de la salud, como curanderas, herbolarias, parteras, médicas, líderes espirituales, entre otras más; son quienes también han participado a lo largo de la historia en la atención médica de sus comunidades.