>> Cuando de refilón escucho los discursos del candidato del PRI a la gubernatura de Oaxaca, Alejandro Avilés Álvarez, con su oratoria falsa y su barril sin fondo de promesas de todo tipo que todos conocemos, me dan ganas de pensar en otra cosa.
Genaro Gómez
Al pueblo de México.
Cuando de refilón escucho los discursos del candidato del PRI a la gubernatura de Oaxaca, Alejandro Avilés Álvarez, con su oratoria falsa y su barril sin fondo de promesas de todo tipo que todos conocemos, me dan ganas de pensar en otra cosa.
Me dan ganas de mirar hacia arriba. Pensar en los grandes proyectos liberadores que Andrés Manuel le ha propuesto al país, como la reforma en materia eléctrica que debía permitir a la CFE sobrevivir como una empresa de los mexicanos. Y me da la impresión de que los priistas oaxaqueños se revuelcan en el fango del “ahora sí va a ser diferente”, después de que han tenido al Estado sumido en la más absoluta precariedad durante toda su historia moderna.
El mismo Alito, quien en una entrevista dijo que el PRI “jamás va a votar nada que vaya en contra del beneficio del PRI”, lo dice con toda la seriedad posible. No, no fue un descuido del lenguaje. Es la expresión más acabada de la separación entre su partido y el pueblo de México, a quien ve con displicencia, si no con desprecio.
Dejemos que sigan profundizando su separación con la sociedad mientras Salomón Jara trabaja precisamente en el sentido inverso, haciendo de la participación de las mayorías, de sus aspiraciones y deseos la materia prima de sus futuros programas de trabajo. Es por eso que estamos con Salomón.
El PAN tiene su posición en torno a la reforma, pero eso no nos extraña. Pacientemente, los gobiernos panistas crearon las condiciones para que en el gobierno de Peña Nieto se votara por la desaparición de la CFE como empresa nacional, y les diera a las empresas extranjeras en charola de plata los más jugosos negocios.
La Historia nos va a dar la razón. El pueblo no ha dicho aún la última palabra. Muchas luchas vienen adelante, y estamos dispuestos a combatir en todos los casos por la Cuarta Transformación. ¡Viva Morena y viva la Cuarta Transformación!
